
El espíritu esperaba claro,
apiádate gran playa triste
del temor que pone vehículos
y pequeños espejos abajo.
Lloraba el día bello,
creaba amor
el coqueto dinero,
asistía el aire tranquilo,
lejos el mar serio
cantaba metálica melodía.
Asistía invitado forzado
a fiesta de los sentidos,
!piedra preciosa escondida!
ser testigo, privilegio divino.
apiádate gran playa triste
del temor que pone vehículos
y pequeños espejos abajo.
Lloraba el día bello,
creaba amor
el coqueto dinero,
asistía el aire tranquilo,
lejos el mar serio
cantaba metálica melodía.
Asistía invitado forzado
a fiesta de los sentidos,
!piedra preciosa escondida!
ser testigo, privilegio divino.